La opinión médica se basa con frecuencia, en la información que llega a través de estudios de investigación científica llevados a cabo por laboratorios farmacéuticos. Se trata de ensayos clínicos que se refieren a la experimentación y el desarrollo de fármacos específicos para tal o cual enfermedad. Inevitablemente, una gran parte del pensamiento médico es farmacológico.
Según el Instituto de Medicina Funcional, (IFM) una organización educacional norteamericana subvencionada privadamente, cuyo objetivo es establecer un programa de becas para facultades de medicina y programas de residencia medica, hay un retraso de 50 años entre los últimos descubrimientos científicos y la práctica médica actual.
Los especialistas médicos suelen explicar que, por causas desconocidas, hay personas más sensibles a un exceso de histamina. Algunos piensan que las reacciones alérgicas y el asma a menudo desencadenados por el polen y las gramináceas, son consecuencia de una predisposición genética o de la ‘mala suerte’. La solución que ofrece la medicina tradicional alopática son los fármacos antihistamínicos o corticoides.
Es bien conocido que los corticoides suelen bajar las defensas, predisponen a engordar y a la osteoporosis. Sin embargo, la mayoría ignoran que los antihistamínicos pueden tener efectos y pueden causar arritmias y alteraciones cardiovasculares.
A pesar de que no hay garantía de mejora definitiva, y que los efectos secundarios pueden ser graves, muchos médicos aconsejan una serie de vacunas para inmunizarse contra ciertos alérgenos. Su precio suele ser bastante elevado, pueden tardar un año en hacer efecto y podrían tener efectos secundarios como una reacción anafiláctica severa.
http://www.webmd.com/asthma/allergy-shotsimmunotherapy-for-asthma
Una alternativa saludable entonces, sería una revisión y tratamiento quiropráctico de columna y prescindir de algunos alimentos. Se puede conseguir una mejora casi inmediata de las molestias sin efectos secundarios, en cambio, mejora la señal nerviosa hacia las vías respiratorias y también hacia los músculos y órganos como corazón, hígado, vesícula, estomago, páncreas, intestino, vejiga y riñones.
Un estudio de investigación, publicado el año pasado, concluyó que el tratamiento quiropráctico ofrece una alternativa válida para los pacientes asmáticos. Alcantara J, Alcantara JD, Alcantara J. The chiropractic care of patients with asthma: A systematic review of the literature to inform clinical practice. Clinical Chiropractic. 2012;15(1):23-30.
Preparaos para disfrutar de una primavera con mucha energía vital y sin molestias haciendo el tratamiento de mantenimiento quiropráctico estacional.
La semana pasada, en la consulta, uno de nuestros pacientes me contó que, en un viaje de trabajo, tuvo una conversación al respecto con una persona que conoció:
-Una joven me dijo que temía mucho al polen porque cada año sufría los síntomas desagradables de alergia.
-Yo le contesté de inmediato: “Pues, la entiendo perfectamente. A mí también me solía pasar. Cada año la primavera era un suplicio pero, desde hace unos seis años, dejo de molestarme”
-¿De verdad? ¿Qué hizo Ud.?
-Fui a ver a mi doctora quiropráctica por molestias en la espalda. Me trató la columna y me enseñaron unos ejercicios posturales. Aprendí que, las subluxaciones vertebrales pueden interferir con la correcta transmisión nerviosa y que, además de molestias musculares, pueden dar lugar a síntomas tipo alergia, asma o bronquitis. Desde entonces, la primavera ya no ha vuelto a ser un problema para mí.